Hacia 1930 se comienza a utilizar hormigón y concreto asfáltico para la pavimentación urbana. Cae la demanda de adoquines, cordones y granitullos de piedra. La producción se volcó a la piedra triturada. Las canteras debieron despedir gente y muchos empresarios quebraron. Muchos de sus obreros emigraron a la ciudad de Mar del Plata a trabajar en las canteras de piedra blanca.
Hoy en día continúa la actividad en algunas canteras de Tandil. Aunque ya no de la manera artesanal de las épocas de nuestros abuelos.
Visita a la casa de Alfredo Fadon uno de los ultimos picapedreros